Lesson 1, Topic 1
In Progress

4.1. Introducción

La salud mental está irrefutablemente entrelazada con nuestra salud general, pero en el deporte a menudo se pasa por alto.

El deporte es una herramienta vital para mejorar la salud mental y fomentar sentimientos de bienestar, autoestima y autovaloración. Puede ayudar a reducir los síntomas de ansiedad y depresión y se ha relacionado con la mejora de la función cognitiva y la salud cerebral.

Aunque una salud mental óptima es importante para el rendimiento deportivo, también es un recurso valioso para los deportistas fuera de la competición y a lo largo de su vida. Permite el desarrollo de identidades atléticas y no atléticas holísticas y equilibradas y puede ayudar a gestionar con éxito transiciones profesionales difíciles, incluida la jubilación.

Determinar la prevalencia de los síntomas y trastornos de salud mental en el deporte sigue siendo un reto, y escasean los instrumentos de cribado fiables, válidos y específicos para el deporte. A pesar de ello, se sabe que los deportistas experimentan síntomas de salud mental en porcentajes significativos pero comparables a los de la población general. Un estudio de investigación de 2019 encontró que el 34% de los atletas de élite y el 26% de los ex atletas reportaron síntomas de ansiedad o depresión.

Dichos síntomas pueden surgir debido a retos vitales experimentados fuera del deporte, pero también hay formas en las que el deporte puede afectar negativamente a la salud mental. El entrenamiento y la competición excesivos o intensos pueden provocar agotamiento, estrés y ansiedad. Además, la presión por rendir a un alto nivel puede provocar sentimientos de decepción, fracaso y disminución de la autoestima, sobre todo en los deportistas propensos al perfeccionismo. Esto se suma a los retos vitales que se experimentan fuera del deporte, como el duelo, los conflictos en las relaciones y las dificultades económicas.

A pesar de la prevalencia de los trastornos mentales en la población atlética, muy pocos deportistas buscan o reciben tratamiento. La estigmatización, la falta de conocimientos sobre salud mental, una cultura de autosuficiencia que limita la vulnerabilidad, el coste económico y el acceso restringido a la asistencia constituyen barreras pertinentes para la búsqueda de ayuda.

En este módulo aprenderá que el COI reconoce la prevalencia de las enfermedades mentales entre los deportistas, los daños potenciales asociados a la falta de tratamiento y los beneficios potenciales de un funcionamiento psicológico positivo. El COI tiene un papel y una responsabilidad únicos en el apoyo a la salud mental de los atletas, garantizando que se derriben barreras y se allane el camino hacia una sociedad más igualitaria y saludable. La Agenda Olímpica 2020+5 nos pide que miremos más allá de los Juegos Olímpicos y contribuyamos a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas sensibilizando a la opinión pública sobre la importancia del bienestar mental para la salud pública, reduciendo el estigma en torno a la salud mental y fomentando comportamientos de búsqueda de ayuda (Introducción del Plan de Acción de Salud Mental del COI, 2023).